Hace poco me enseñé a usar pestañas postizas, el pegamento líquido quema demasiado...sin embargo, la belleza cuesta...frase que repetí en mi mente como una media hora.
Los ojos son ventanas del alma, inspiración de leyendas y profundos sentimientos... he tenido que voltear mi rostro varias veces al toparse con enigmantes historias al ver traspasados esos hermosos ojos.
Me gustan mi ojos, creo que son lo suficientemente honestos como para que descifren lo que pienso, pero ese día...el día en que usé las pestañas postizas, me sentí disfrazada... umm maquillada de la manera mas inusual, acentuando y dejando al descubierto esas puertas de mi alma. El color sobre los párpados, el delineador alargando la forma, las pestañas hipnotizando el espejo... momento mágico de uno mismo.
La mirada cautivadora llena de deseo por mostrarse y ser notada, y lo mas desconcertante...es que lo había logrado, había desubierto, habia enmarcado la mirada.
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